Selena Quintanilla, la denominada reina del Tex-Mex, tenía 23 años cuando se preparaba para dar el gran salto al mundo de la música anglosajona. Había acumulado gran fama en el mercado latino y todo apuntaba a que su nueva etapa también sería todo un éxito. Pero sus sueños fueron truncados el 31 de marzo de 1995.