Hasta hace poco se pensó que el cacao provenía de Mesoamérica, principalmente México o Guatemala. Los primeros escritos que tenemos del producto de esta planta provienen de la época de la conquista, siendo llevado a España justamente desde puertos mexicanos, para luego esparcirse por Europa como pólvora. Aún existe la receta, que debe datar del siglo XIV o antes, de la sopa de cacao con chile y especias que tomaba Moctezuma. Al lector que tenga la oportunidad de problarla, es un manjar.