En la vanguardia de ediciones didácticas con sello nacional está Holguín.

Es importante recordar que en el mercado el texto que sirve para que aprendan niños y jóvenes casi se queda en un callejón sin salida. Y de manera injusta. Porque con editoriales ecuatorianas dedicadas a ese producto y con autores de primera clase, se da preferencia a marcas y títulos extranjeros.

Debemos respaldar al sello nacional, cuanto más que en libros para estudiar, sus páginas tienen que ser auténticamente nuestras dejando al margen errores y fallas que se derivan de matrices extranjeras.

Los Holguín forman varias generaciones de editores de libros. Unidos en un núcleo de fecunda producción está la batuta del Dr. Rubén Holguín Arias y siguen los Holguín Cabezas y Holguín Vinces.

Recordamos hace dos décadas los libros de excelente enseñanza para colegiales con responsabilidad de una maestra en su excelencia. Era de ver el interés en colegios como el Americano cuando el libro de la señora de Holguín era el imán para trabajar en clases. Lo digo por propia experiencia.

Hoy la editorial es signo estimulante de lo que el talento, el trabajo sin horarios y la avanzada técnica editorial pueden hacer para orgullo ecuatoriano.

Y no solo el texto de estudio es el modelo de didáctica y atracción visual. Hay una larga lista con títulos encantadores de libros para niños.

Las asignaturas colegiales desde Literatura hasta el motivo más moderno, la Geografía Humana, únicamente pueden calificarse con sello de calidad en nuestra marca ecuatoriana. Porque es arte difícil presentar en forma llamativa y veraz los asuntos que a la ligera podrían parecer cansinos.

El desarrollo del pensamiento tiene que encontrar andariveles que lo inciten a desplegarse, como una carrera atlética. Y los entrenadores son el educador superior espiritualmente joven y el libro como auxiliar que debe llevar al crecimiento constructivo la novedosa clase.

¿Quién no estará de acuerdo con que hay que desarrollar competencias para la vida? Entonces la propia iniciativa del educador no da para introducir métodos modernos hacia ese fin: la gran facilidad la otorga la serie  Bitácora.

Entre los capítulos que podemos seleccionar aquí, dada la brevedad del espacio, contamos con el  Glosario  que es el vocabulario moderno tipo diálogo y manejable en la siembra de respuestas que llevarán al conocimiento humanístico nuevas formas de entendimiento y expresión.
Siguen en importancia los referentes de nuestra identidad. Porque debemos hacer que florezcan el valor y la amorosa emoción que permitirán aquilatar correctamente al suelo nativo.

En sus textos Holguín ofrece actividades que ayudarán a la evaluación de los tres estados que debemos detectar perfectamente en nuestros pupilos: conocimientos, habilidades y valores entre los que tiene que estar el amor propio o dicho a la moda: la alta estima.

La Comisión Regional de la Unesco acaba de considerar como importante candidato para el reconocimiento anual bibliográfico de excelencia, todo el conjunto de tiempo, trabajo, agudeza intelectual, agilidad artística y amor a la patria que han robustecido la labor de Holguín.