Cambio de residencia
Cuando un padre de familia va a ser transferido a una nueva ciudad y sus hijos ya son adolescentes, éstos difícilmente se sienten a gusto de dejar su ciudad y a todos sus amigos. Su principal preocupación es no conocer a nadie en la nueva población y no tener amigos con quienes salir. Los adolescentes son sensibles a lo que los demás sienten hacia ellos y como padres odiaríamos que se sintieran rechazados. Así que para ayudar a aliviar su tensión y hacer que el cambio vaya mejor le sugiero que haga algunas cosas, como escribir a la nueva escuela donde asistirán sus hijos. Describa a cada uno de ellos, sus gustos, lo que no les gusta y cualquier pasatiempo especial. La escuela podría encontrar para ellos amigos por correspondencia. Se pueden escribir durante un par de meses, por ejemplo. Estarán ansiosos de conocer a sus nuevos amigos y los amigos de la ciudad también. Creo que es una estupenda forma de ayudar a los chicos.
Buena precaución
Si hay niños en su casa, cuide de que todas las ollas que están en la estufa encendida tengan los mangos hacia la parte posterior de la estufa para que los niños no puedan cogerlas. Esta es una precaución que las mamás jóvenes deben de conocer y aplicarla en su hogar. Nunca es excesiva la cautela cuando se trata de proteger a los niños.
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Almacenamiento de cobertores
Si va a guardar por algún tiempo sus cobertores, pruebe esto: enrolle la prenda de manera que quede bien apretado el rollo, colóquelo en una bolsa de plástico transparente y sujete su cerradura con masking tape. Este mismo procedimiento puede seguirse tambien con las colchonetas, con el consiguiente ahorro de espacio y la absoluta comodidad para cuando tenga que sacar uno de los que han quedado al fondo del lugar donde los va a guardar.