No hay motivo más preocupante para un reducido sector de la docencia universitaria y colegial que hablar de evaluación o examen del trabajo y el desempeño académico del docente.

El prejuicio, los rumores y poca información verdadera al respecto, vuelven más oscuro y temeroso lo que debe ser un trabajo armónico, positivo y en dirección al mejoramiento del esfuerzo profesional.

Pero la situación se entona hacia el bien y hacia una realidad mucho más amable. Uno de los talentos más brillantes que tiene la universidad ecuatoriana, el Dr. Wilmer Zambrano Aguilar, M.S.c., entrega un completo enfoque titulado  Sistema Alternativo de Evaluación del Trabajo y Desempeño Académico del Docente Universitario.  El sello editorial es de la Universidad de Guayaquil, donde Zambrano desde antes de especializarse en Europa ejerció la cátedra, y sin tregua mantiene en el vicerrectorado general y en otras especialidades, sus ideas de aguda vigencia.

La nueva cátedra que es urgente para la nueva Universidad se manifiesta en este libro al considerar para una calificación justa: Docencia, Investigación Formativa y Generativa, Actividades de Administración y Gestión, Actividades de vinculación con la colectividad y de compromiso institucional.

Evidente que considera como perfeccionamiento del trabajo evaluativo tomar en cuenta el perfil académico, competencias ético-profesionales. Englobados en derivaciones de las características y estándares de calidad como perspectivas para examinar y ponderar la calidad de trabajo y la dimensión y desempeño académicos.

Zambrano ha puesto el máximo cuidado ante el derecho que los docentes tienen a su privacidad y el derecho público a conocer que también tiene la gran familia universitaria, porque el fin es que la universidad ecuatoriana avance por rutas de excelencia.

Entonces, este libro desarrolla pasos para preservar la privacidad del profesor y la conveniencia de que los estudiantes se informen –también con criterio universitario superior– sobre cuánto les atañe tan directamente como la acción docente de la que son parte esencial.

Del detalle orientador que en cada página plantea este libro, todo lector entiende que la evaluación que necesitamos debe cumplir las funciones de diagnóstico, ser instructiva, educativa y desarrolladora.

La preparación, el talento, la formidable experiencia y la voluntad de servicio de Zambrano Aguilar nos llevan a pensar que de la mano de este Sistema Alternativo una de las ganancias será un mejor docente capaz de percibir críticamente su desempeño, sin temer alguna debilidad o momentáneo error pues de estos dos motivos se aprende bastante y la función de la cátedra será mucho más consciente.

Las invitaciones que a una mejor universidad hacen nuevas leyes y reglamentos así como el Consejo Nacional de Educación Superior tienen que influir constructivamente en los talentos universitarios para que por el bien del conglomerado académico las energías se consoliden hacia metas sumamente necesarias de superioridad.

Con la guía que la Universidad de Guayaquil ha editado notamos que hay que preservar para honor del docente las competencias esenciales para su desempeño, tomando en cuenta la sensibilidad pedagógica con la gestión de clases (Metodología) y con el refuerzo de las habilidades destrezas básicas de los estudiantes, con la motivación y los procesos evaluativos y medición de logros del aprendizaje.