Había publicado por error que este restaurante había cerrado, pero fue una equivocación mía por la que ofrecí disculpas. La Villa Ristorante goza de buena vida y mantiene una fiel y próspera clientela. El sitio es bastante pequeño, el dueño, Silvio Bugnano, oriundo de Torino (Italia), hombre bonachón, muy extrovertido, no busca grandilocuencia ni le interesa.