La noche del sábado 24 de febrero llegó al sur de Quito un vehículo que no tenía puertas y otras partes de la estructura.

Una unidad de la Policía Nacional del circuito Chillogallo se desplazó hasta las calles Martha Bucaram y Nicolás Cevallos. Una vez en el lugar, los agentes tomaron contacto con el dueño del vehículo, quien informó que aproximadamente a las 23:00 estaba en el sector de la calle Ajaví, en el Distrito Eloy Alfaro, junto con su novia, su prima y la pareja de esta última.

Según el relato del ciudadano, después de consumir varias bebidas alcohólicas, se despertó en la dirección antes mencionada para darse cuenta de que su vehículo, un taxi, había sido despojado de las cuatro puertas, el capó y el maletero.

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Los vecinos del lugar informaron que vieron llegar así al vehículo conducido por el propietario.

Ante esta situación, los ocupantes del carro fueron evaluados por una unidad del Cuerpo de Bomberos Quito (CBQ). Según su evaluación, estaban estables, aunque tenían aliento a licor.

Sin embargo, se encontraban orientados en tiempo y espacio, lo que indicaba que su estado de salud no era de gravedad.

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Los ciudadanos involucrados manifestaron su deseo de no presentar ninguna denuncia formal. Únicamente solicitaron asistencia para trasladarse hasta el sector del Conde, donde se encuentra su domicilio.

Además, se acordó que el hermano del propietario del vehículo se haría cargo de este y se encargaría de ponerlo nuevamente en funcionamiento. (I)