Mientras guarda prisión preventiva en la Cárcel 4 de Quito, por el caso Metástasis, Wilman Terán presentó su renuncia irrevocable al cargo de presidente del Consejo de la Judicatura (CJ).

Formalizó su decisión el jueves 20 de diciembre, mediante un oficio dirigido a la Nicole Bonifaz, presidenta el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS). La carta de su renuncia fue publicada en su cuenta de X (antes Twitter).

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En la carta, el ahora exfuncionario destacó, entre otras cosas, que durante el tiempo que estuvo en funciones lideró procesos para superar la crisis de la Función Judicial.

Dijo, además, que sufrió “cercos mediáticos” y acusó a medios de comunicación de ser “patrocinados por imperios comunicacionales serviles a quienes siempre han dominado la justicia”.

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Agregó que combatió y que “jamás” favoreció a las mafias delincuenciales con las que ahora se lo asocia.

“Jamás otorgué ningún tipo de decisión que pudiese favorecer su impunidad. ¿Cómo puede integrar una estructura criminal liderara por Leandro Norero cuando no lo favorecí con una acción de habeas corpus, y al contrario remití un proyecto de sentencia con negativa a sus pretensiones, el cual posteriormente fue aprobado y notificado por un Tribunal de la Corte Nacional de Justicia, mientras me encontraba en ejercicio de una licencia laboral”, escribió a la presidencia del Consejo de Participación Ciudadana.

Según Terán, su vinculación al caso Metástasis es “maliciosa”. Y explicó que renuncia a la presidencia de la Judicatura porque debe “luchar para desvanecer las falsas y reiterativas acusaciones” en su contra.

Insistió en que su detención fue un “secuestro fraguado y ejecutado por el Estado”. Y añadió que da un paso al costado debido a que la Fiscalía sostiene que por el cargo que ostentaba podía “intimidar” a los administradores de justicia del país.

“Es mi decisión afrontar el proceso judicial como un ciudadano que no ejerce ningún tipo de cargo público, para que no se diga que mi inminente liberación fue forjada por el ejercicio de las funciones de Presidente del Consejo de la Judicatura”, ratificó.

Terán es uno de los 16 detenidos que guardan prisión preventiva por el caso Metástasis, en el que se investiga el presunto delito de delincuencia organizada.

Según la Fiscalía, el ahora extitular de la Judicatura participó en una “empresa criminal” orquestada en 2022, en la Función Judicial, para beneficiar con resoluciones judiciales y privilegios penitenciarios a Leonardo Norero, alias El Patrón, y a sus familiares, quien habría pagado coimas para obtener su libertad, impunidad y protección en la cárcel.

De acuerdo con la investigación del Ministerio Público, Wilman Terán era conocido como alias Diablo o El Jefe.

Ocho ‘jueces suicidas’, por el momento, son ubicados dentro de la organización criminal del caso Metástasis

El padre de Terán presentó un pedido de habeas corpus con que intentó sacar a su hijo de prisión, para que se defendiera en libertad. Se argumentaron violaciones al momento de la detención y tratos inhumanos y crueles.

Dicho recurso fue negado el 19 de diciembre por un Tribunal de la Corte Nacional de Justicia, que concluyó que no se justició el pedido y no se encontraron vulneraciones a los derechos constitucionales del procesado.

Wilman Gabriel Terán Castillo fue designado presidente del Consejo de la Judicatura el 13 de febrero de 2023, de forma unánime por el Consejo de Participación Ciudadana.

Con el paso de los meses su gestión fue criticada al punto que el presidente de la Corte Nacional, Iván Saquicela, ha dicho en reiteradas ocasiones que Terán “traicionó” la confianza depositada en él.

Una vez que se dictó prisión preventiva en contra de Terán, quien lo reemplaza en la presidencia del Consejo de la Judicatura es Álvaro Román. (I)