No es una mansión. Es una casa de dos pisos, con 327 metros cuadrados de construcción, dentro de un modesto conjunto residencial de Tumbaco, en el valle oriental de Quito. No tiene piscina, sino apenas un patio. Viéndola desde fuera cuesta creer que Nilsen Arias Sandoval, el exgerente de Comercio Internacional de Petroecuador, haya gastado más de $ 600.000 en esa vivienda.