Una noche antes del acto de campaña en el que participaría el candidato presidencial Fernando Villavicencio Valencia, en el sector de la Amazonas y Gaspar de Villarroel, al norte de Quito, habría sido transitado por dos vehículos que son parte de la investigación del asesinato del político ocurrido la tarde del 9 de agosto de 2023, en medio de las elecciones generales anticipadas que vivía el Ecuador.
En el quinto día de audiencia de juzgamiento en contra de cinco procesados por el crimen político, también se conoció que Carlos A. L., alias Invisible, estaba recluido en la cárcel de Cotopaxi, en una celda acomodada y en mejores condiciones.
Este miércoles, 3 de julio, el Tribunal de Juzgamiento continuó con las diligencias en las que la Fiscalía General del Estado presenta las pruebas y elementos que vincularían a cinco personas con el asesinato del exasambleísta y excandidato a la presidencia de la República en el 2023 Fernando Villavicencio.
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En esta jornada, la agente fiscal Ana Hidalgo presentó más de una docena de peritos de criminalística de la Policía Nacional, que dieron detalles de lo que se encontró, sobre todo, en el análisis de videos de cámaras de seguridad de los sitios en los que transitaron los sospechosos entre el 8 y 9 de agosto de 2023, así como de los allanamientos que se realizaron en las investigaciones.
Fue en el primer testimonio de la mañana, en el que el perito José R. contó lo que halló tras la extracción de información de varias cámaras de seguridad de locales comerciales ubicados en la avenida Gaspar de Villarroel y Amazonas, en el norte de Quito, donde está el coliseo del colegio Anderson, en cuya salida Fernando Villavicencio fue asesinado cuando iba a subirse a una camioneta, tras encabezar un mitin político el 9 de agosto.
El oficial analizó un pendrive que contenía una carpeta con 200 archivos, una de ellas nombrada ‘Chifa’, en los que se ve a dos hombres que caminan hacia un local a eso de las 17:08 del 9 de agosto de 2023 y luego siguen por una vereda que lleva al coliseo.
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A las 17:13 se ve pasar un vehículo blanco similar a un jeep.
En otra cámara, se ve el paso de un carro “sedán de color amarillo tipo taxi” y se ve a dos hombres que llevan sobre sus hombros una tela blanca.
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Con las investigaciones se obtuvo lo grabado por otra cámara de seguridad nombrada ‘parqueadero 1′ y está fechado el 8 de agosto de 2023.
Su contenido había llamado la atención de los agentes, por lo que se dispuso una ampliación del informe pericial. En los resultados se muestra que el carro jeep blanco transita por la avenida Amazonas a las 23:03.
Minutos más tarde, a las 23:13, vuelve a pasar el jeep blanco y con segundos de diferencia, pasa el sedán tipo taxi. Los dos de las mismas características de los que se observaron en las grabaciones del 9 de agosto.
El vehículo jeep se trataría del Kia Sportage, que fue identificado en seguimientos previos con Laura C. B., a quien se la investigaba por delincuencia organizada.
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El perito dijo que las grabaciones no permiten observar quién los conducía.
La Fiscalía, en su anuncio de prueba, convocó a 186 testigos, con los que preveía concluir la tarde de este miércoles y que se realizan en el Complejo Judicial Norte de Quito, presidido por el Tribunal penal conformado por los jueces Milton Maroto (ponente), Julio Rumiguano y Pablo Coello, quien remplaza a Gonzalo Fuentes.
El Tribunal esperaría concluir el viernes, 5 de julio, para pasar a escuchar los alegatos de las partes procesales. No obstante, se podría convocar a más testigos de los acusadores particulares, en este caso, Verónica Sarauz, viuda de Villavicencio, y de los cinco sospechosos.
Ellos están considerados como autores materiales del crimen y son Carlos Edwin A. L., alias Invisible, como el autor mediato; Laura Dayanara C. B., alias la Flaca, como coautora; y Erick Marcelo R. P., Víctor Alfonso F. y Alexandra Elizabeth Ch. F., los tres como cómplices.
En esta audiencia de este miércoles también llamó la atención el testimonio de un perito que ingresó a la celda de Invisible.
El criminalista Agustín G., que realizó la inspección ocular del allanamiento en la cárcel de Latacunga (Cotopaxi), en lo que era la celda de Carlos Edwin A. L. (que fue trasladado a La Roca), donde se encontraron dispositivos electrónicos.
Entre las evidencias están siete teléfonos celulares, nueve SIM (módulo de identificación del abonado); routers fundas con polvo blanco, otra con sustancia celeste y un cuaderno.
El oficial había podido observar que la celda no parecía una celda de prisión, sino una habitación “tipo suite”, que habría sido adaptada con mejores materiales y que no estaba numerada como las demás, pero estaba junto a la celda 25 del pabellón 25 de máxima seguridad.
“Era diferente”, dijo el oficial al Tribunal, aunque parecía desordenada porque militares habían ingresado al centro penitenciario.
La puerta de la celda habitación de Carlos A. L. tenía puertas de color negro y estaba bloqueada. El lugar tenía baño con dos ventanas, lavabo, habitación de dos ambientes, techo de cielo raso, paredes cubiertas de un material plástico (tipo forro) similar a ladrillos de colores blanco y negro”, narró el oficial.
Durante el allanamiento a ese centro de rehabilitación se habían recabado, en otras celdas, dispositivos como router para funcionamiento de wifi; 21 municiones y un disco compacto (CD) que contenía las palabras “Angulo Carlos 26-04-23″.
Otro oficial de criminalística Luis B. hizo la pericia de inspección ocular y de reconocimiento de indicios en un inmueble en el sector de Monjas en Quito, donde se detuvo a los seis ciudadanos colombianos implicados en el asesinato —aunque fueron encontrados muertos en sus celdas en octubre del año pasado—.
Allí se encontraron 19 indicios sobre la cama. Un dron, tres tablets, trece celulares, un reloj, una balanza electrónica, prendas de vestir, una chompa, 26 fundas de una sustancia verdosa y otra funda con una sustancia granulada blanca, que corresponderían a marihuana y cocaína.
En otro sector se observó un carro Nissan similar a un jeep de color gris en el que se encontró una maleta, en cuyo interior había un arma, un fusil negro, un subfusil, tres armas de 9 milímetros, una pistola, seis alimentadores para municiones 9 milímetros, seis alimentadoras para calibre .223, dos portapistolas y un pasamontañas.
Otros objetos como 287 cartuchos de 9 milímetros y 97 cartuchos .223; además de tres granadas de uso militar color verde que habían sido levantadas por el Grupo de Intervención y Rescate (GIR). Muestras de hisopado de indicios en el volante, palanca y freno de mano, y un rastro parcial en una ventana de origen dactilar.
En horas de la tarde, la Fiscalía presentó como testigo al perito Hugo T., quien contó que al hacer el cotejamiento de información de imágenes de ambiente obtenidas del celular de Johan C. (sicario fallecido) se confirmaría que son similares a las que se hallaron en los dispositivos incautados en la celda de Carlos A. L., el Invisible.
Este jueves, desde las 08:30, avanzará la exposición de testigos, pero de los procesados, aunque en algunos casos se habían allanado a los que presentó la Fiscalía. (I)
