Pese a la salida del vocal titular Fausto Murillo del Consejo de la Judicatura (CJ), pues con 102 votos a favor la Asamblea Nacional decidió, el jueves 29 de febrero pasado, su censura y destitución del cargo, el pleno del órgano de gobierno, administración, control y disciplina de la Función Judicial no para su marcha y avanza su trabajo ahora con tres vocales suplentes y un presidente temporal.
Analizar el próximo concurso público de selección y designación de jueces y conjueces para la Corte Nacional de Justicia (CNJ) fue lo que reunió, el viernes 1 de marzo pasado, al presidente del CJ, Álvaro Román, y a los vocales Yolanda Yupangui, Solanda Goyes y Merck Benavides. Todos fueron convocados para mantener una cita de trabajo con el presidente encargado de la CNJ, José Suing, y la presidenta subrogante (e), Enma Tapia.
Publicidad
El objetivo de esta cita, la cual ya contó con un pleno del CJ casi completo, era realizar un análisis técnico de lo que será el próximo concurso público para definir jueces y conjueces para el más alto órgano de justicia ordinaria del país. Como parte de las conversaciones existió un compromiso de las autoridades de ambas instituciones para coordinar acciones para garantizar que el proceso se realice en un marco de transparencia y en cumplimiento de la Constitución y las leyes.
Gobierno se ‘vira’ a última hora y suma los votos para destituir a Fausto Murillo de la Judicatura
Murillo era el único vocal que quedaba de aquel CJ que fue designado por el Consejo de Participación Ciudadana de transición, dirigido por el fallecido Julio César Trujillo, y posesionado por la Asamblea en el 2019. Junto a Murillo también el pleno del legislativo censuró al exvocal de la Judicatura Juan José Morillo, quien fue separado del cargo con anterioridad, pues fue llamado a juicio por el delito de tráfico de influencias.
Publicidad
El presidente Román en la reunión del viernes pasado señaló que se han sentado las bases técnicas y jurídicas para dar legitimidad democrática al concurso y citó como ejemplo la convocatoria realizada a las universidades del país para que sean parte de este proceso.
De su parte, José Suing afirmó que en la actualidad hay un derrotero diferente en la Función Judicial y que, en esa medida, el trabajo conjunto permitirá avanzar en el fortalecimiento de la administración de justicia. “Discutiendo los temas sobre la mesa porque no hay agenda oculta y hay que trabajar conjuntamente resolviendo los problemas”.
Enma Tapia sostuvo que el concurso para designar jueces nacionales es fundamental para el país, por lo que pidió transparencia. “Sé que con ustedes la vamos a tener”, señaló.
En enero pasado, el presidente Román y los vocales Yolanda Yupangui y Fausto Murillo, aún en funciones, de forma unánime declararon la “nulidad insanable” total del Concurso Público de Méritos y Oposición, Impugnación Ciudadana y Control Social que se inició el 28 de julio pasado por el CJ, dirigido a ese momento por Wilman Terán.
El proceso ya estaba suspendido por un fallo constitucional de la jueza Patricia Segarra, quien aceptó el 18 de diciembre pasado una acción de protección planteada por el Colegio de Abogados de Pichincha y de la Federación Nacional de Abogados del Ecuador. La jueza Segarra decidió aceptar el pedido de Paúl Ocaña, presidente de ambas organizaciones de abogados accionantes, y ordenó que la Judicatura suspenda el concurso, hasta que el pleno del organismo resuelva sobre lo actuado y los reclamos de los aspirantes a ocupar esas funciones.
En el Consejo de la Judicatura se está pendiente de la terna que envíe la Asamblea Nacional para designar el reemplazo de Fausto Murillo en el pleno de la Judicatura. Elsie Cely era la vocal suplente del Murillo, pero horas antes de que se conociera la censura y destitución, ella renunció al cargo. La designación del nuevo vocal queda en manos del Consejo de Participación Ciudadana.
Los ahora vocales Benavides, Goyes y Yupangui ratificaron la apertura del CJ a conocer y procesar los aportes que la Corte Nacional presente respecto del concurso
Merck Benavides, el recién posesionado en el cargo de vocal del CJ, teniendo como vertiente la Defensoría Pública y en reemplazo de Morillo, destacó la importancia de la coordinación institucional. “Tomaremos las acciones pertinentes para que el Concurso de Méritos y Oposición sea totalmente transparente. Aquí está el prestigio de la Función Judicial”.
La vocal Solanda Goyes, quien también se integró hace una semana al pleno del CJ, habló de la necesidad de trabajar en forma conjunta y ver al proceso como algo integral, para así “al menos en el origen podamos mirar no solo la calidad, sino también la probidad”.
Según el CJ, las reuniones de coordinación se mantendrán. Ese fue uno de los acuerdos alcanzados entre las autoridades. El objetivo es que para el inicio del concurso se hayan procesado los aportes planteados por parte de las dos instituciones.
El titular del Consejo de la Judicatura ha estimado que el nuevo concurso podría durar entre seis y siete meses. (I)