El temor a que la economía global se encamine a una recesión ha hecho que la mayoría de las grandes Bolsas europeas hayan cerrado la sesión del martes con pérdidas cercanas al 3 %, en sintonía con la apertura en negativo de Wall Street, lo que también ha causado una bajada del 10 % en los precios del petróleo y la depreciación del euro frente al dólar, en su mínimo desde 2002.