Ecuador es el cuarto país en Latinoamérica con los mayores índices de desnutrición crónica infantil (DCI), y se estima que 2.3 millones de ecuatorianos padecen hambre. Sin embargo, se desperdician 939.000 toneladas anuales de alimentos, correspondiendo 45% de ellas a Guayaquil.

Así lo revela Diakonía, un banco de alimentos que funciona en la ciudad desde hace más de diez años y que busca reducir los desperdicios de alimentos llevando comida a los más necesitados y atendiendo a las comunidades y personas en situaciones de vulnerabilidad.

A través de sus proyectos e iniciativas, Diakonía asegura un “impacto positivo en la lucha contra el hambre y el desperdicio de alimentos”, explica una de sus voceras. Mensualmente, la entidad impacta positivamente en la alimentación y nutrición de más de 53 mil personas.

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Este banco de alimentos nació el 13 de octubre del 2010, como filial de la Arquidiócesis de Guayaquil, bajo la presidencia de Monseñor Antonio Arregui, arzobispo de Guayaquil. Tras el terremoto del 2016, Diakonía apoyó a mantener la seguridad alimentaria de los afectados por la tragedia. Asimismo durante la emergencia sanitaria del covid-19, cuando la población en situación precaria necesitaba de ayuda con sus servicios básicos.

Actualmente, la organización se encuentra acreditada por la Global FoodBanking Network, asociación con más de 900 bancos de alimentos en el mundo, quienes contribuyen con la alimentación de 20 millones de personas.

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¿Qué tipos de voluntariados hace Diakonía?

Voluntariado Corporativo

Las empresas y corporaciones pueden cumplir con sus responsabilidad social al aliarse a Diakonía, participar en sus actividades o donar recursos para que la organización cumpla su misión.

De acuerdo a la entidad, los voluntarios corporativos pueden aportar en la selección y clasificación de productos, garantizando que los alimentos lleguen en óptimas condiciones a quienes más los necesitan.

Además, en el área de Fruver, los voluntarios pueden colaborar en el rescate de frutas y verduras en el Terminal de Transferencia de Víveres (TTV), asegurando que los alimentos no se desperdicien.

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Otras de las iniciativas que gestiona Diakonía es la oportunidad de visitar fundaciones que atienden diversas poblaciones, como niños, adultos mayores, personas con discapacidad, mujeres gestantes, entre otros. Allí, participan sirviendo comida, realizando actividades lúdicas y ayudando a atender las necesidades básicas de los usuarios.

Voluntariado de instituciones sociales

Los miembros de las fundaciones aliadas a Diakonía también pueden involucrarse activamente en las labores de la organización y en el apoyo a comunidades vulnerables.

Desde acompañar en rutas para el rescate de alimentos, hasta receptarlos y despacharlos, los voluntarios ayudan en una cadena para gestionar que los recursos sí lleguen a las personas que los necesitan.

Su principal objetivo es promover la seguridad alimentaria y reducir el desperdicio de alimentos en Guayaquil.