El tenso momento diplomático que México y Ecuador atraviesan por la incursión de la Policía y el Ejército ecuatorianos el 5 de abril pasado en la Embajada de México, en Quito, para capturar al exvicepresidente Jorge Glas, cruzó la línea política e ingresó al ámbito comercial una vez que, el 11 de abril, la canciller mexicana, Alicia Bárcena, aseguró que rompieron relaciones comerciales con Ecuador, al referirse al proceso que estaba abierto para la firma de un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambas naciones, pero que no había tenido avances desde diciembre del 2022.