La Herencia Manabita inauguró local en Samborondón

Desde el viernes 22 de diciembre, La Herencia Manabita atiende todos los días, de 08:00 a 23:00, en su nuevo restaurante ubicado en el km 9,5 av. Samborondón, en el centro comercial Jardines Plaza.

“Nuestros clientes nos pedían muchísimo un local por este sector y ya estamos acá con la gastronomía ancestral. Pero no solamente tenemos platos como el colonche, la bola de batea (que es el verdadero bolón manabita), el viche o la fritada manaba, sino que tenemos una nueva carta con comida fusión. Por ejemplo: la deconstrucción del viche, que es un tipo risotto, un cremoso de viche maravilloso”, explica Lupe Gutiérrez, propietaria del local.

Otra de las novedades es la carta de cocteles, donde el ingrediente estrella es la caña manabita, licor que está presente en la bebida de la casa: Jaro jaro jaro, además en Bahia Sour, Passion Sour y en las caipiriñas a lo manaba.

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Lissette Guevara, socia de La Herencia Manabita, cuenta que la inauguración se dio luego de cuatro meses de planificación. “Empezó con diseños y pruebas conllevan abrir un restaurante de esta categoría. La decoración tiene todo que ver con Manabí, tenemos una pared llena de palmeras de plátano, platos y sombreros de paja toquilla en este local que tiene una capacidad interna de 40 personas, pero externamente nos podemos extender por las facilidades que nos da la plaza comercial, que es muy segura también”.

Este es el cuarto local que abre la marca a nivel nacional, que mantiene su primer restaurante en Guayaquil, ubicado en Urdesa central, mientras que en Quito tiene dos establecimientos: en Holanda y av. de los Shyris, y en Puembo. También oferta una línea de congelados (bolones, corviches, muchines y más).

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La apertura en Samborondón representa 20 nuevas plazas laborales. “Es una maravilla poder dar trabajo a tanta gente que lo necesita. Somos gente que seguimos apostando, a pesar de todos los problemas que tenemos en nuestro país, apostando a que la gente realmente se interese por sus raíces, a través de la gastronomía”, enfatiza Lupe.

“Para mí es un gran honor pertenecer a esta familia que es La Herencia Manabita, porque es historia, es cultura, es tradición, es pasión. Lupe es una mujer muy apasionada por la cultura, por la comida ecuatoriana y manaba”, concluye Lissette. (I)