Fue escogida Señorita Simpatía en su colegio por voto popular, y desde pequeña imitaba en su casa a la puertorriqueña Iris Chacón, sacudiéndose al ritmo del mambo. Mariela Viteri siempre supo que era carismática y que había nacido con el “show en las venas”; aunque en más de una ocasión, según admitió en una entrevista reciente con La Revista, se sintió incomprendida.