Guillermo del Toro puede ser el primero en afirmar que hacer películas nunca es sencillo. El director detrás de La forma del agua, The Devil’s Backbone y El laberinto del fauno, por mencionar unas pocas, ha experimentado los altibajos de la cinematografía, empujando un poco más los límites en cada ocasión para plasmar su singular visión. Pero para lo que no estaba preparado era para una pandemia que interrumpiera el rodaje de su nueva película, El callejón de las almas perdidas, que desde este jueves se estrenará en los cines a nivel nacional.