“Solo soy Judy Garland durante una hora por noche. El resto del tiempo soy parte de una familia” es una de las frases que podría resumir Judy, la película que retrata mayormente los momentos antes de la muerte de uno de los íconos del cine y la música. Es la actriz oscarizada Renée Zellweger la encargada de encarnar a la artista que sucumbió a la temprana edad de 47 años víctima del alcohol y los barbitúricos.