Robert Downey Jr. lo tiene muy claro: su etapa como Iron Man ha terminado. Y aunque su rostro siga ya ligado de por vida al del carismático Tony Stark, el actor ha declarado que no es solo su "trabajo". "No soy solo este papel que he estado interpretando, no soy un personaje de ficción", ha comentado rotundamente. "No soy lo que hice con ese estudio", zanjaba.