Si yo fuera. Una frase que muchos han tomado para idealizar rostros, formas, momentos. El fotógrafo plástico guayaquileño Chema González utiliza esas tres palabras soñadoras para dar nombre a su exposición, realizada el sábado pasado en el callejón que conecta Los Ceibos con Mapasingue. La muestra solo se efectuó ese día, pero González se refiere a ella en tiempo presente. Persiste.

El artista señala que las catorce imágenes de gran formato (90x60 cm) que integran la muestra, la cual comenzó a planificar desde marzo de este año, no fueron producto de una traviesa chispa creativa, sino de un trabajo sesudo.

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“Cada fotografía es un acto consciente, lúcido, programado, no es un fruto del azar. Es una idea que se va puliendo, que se va desarrollando hasta la escenificación, porque interpreto ese papel. Es algo más concreto que la imaginación, la imaginación es lo que se llama el terreno que no es de nadie”, dice.

González estudió fotografía en Madrid. En esa metrópoli europea forjó su centro fotográfico diapo35mm, que actualmente funciona en su ciudad natal. No se trata de un estudio que solo hace sesiones de fotos, recalca el guayaquileño, sino de un lugar que acoge charlas, concursos, exposiciones y otros proyectos. Es su manera de hacer “artivismo”.

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Los Ceibos, la ciudadela en la que González ha vivido desde siempre, ya ha sido testigo de otras exposiciones suyas: Raw, que la hizo el 7 de mayo del año pasado, justo el día en que se dio la consulta popular; y Abstracciones analógicas, en el puente peatonal de Los Ceibos, frente al colegio Javier.

El 2011 también lo aprovechó para participar en la I Expo Inmundicipal, que se efectuó en Urdesa y para mostrar La fotografía pide paso, una exposición on-line desarrollada junto con Figu García.

Desde las 11:00 hasta las 15:00 estuvo González el sábado en su exposición, explicando el contenido de sus fotografías a los que aparecían por ahí: los que ya sabían de Si yo fuera o los que decidieron quedarse, antes de ir al parque o después de comprar el pan. “Cada exposición tiene una suerte de performance que yo interpreto; cada una de las cosas tengo que explicarlas”, manifiesta.

Chema González quiere hacerle ver a las personas que el arte no está tan lejos de ellas como piensan. Por eso, además de las fotografías de su muestra, hubo otras figuras, sus ‘bastardos favoritos’, dice: la del futbolista Antonio Valencia y la de una mujer ‘presidenta’. Ellos representan una forma de involucrar a los asistentes con el Si yo fuera. Ellos pudieron tomarse fotos con los personajes. A González le gusta dar recuerdos al público y compartirles su fotografía, aquella vista como una forma creativa de expresión.