Es la segunda hija del capitán de la selección ecuatoriana de fútbol, que vive en México.

Tener fama, belleza y una carrera a los 10 años no es posible solamente en las telenovelas. La ecuatoriano-mexicana Cristiane Aguinaga lo tiene todo y, además, ella hace telenovelas. Es parte del elenco de la última producción infantil de Televisa,  ‘De pocas pulgas’, que se estrenó en México el pasado 17 de marzo y que Gamavisión presentará en Ecuador en octubre próximo.

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Cristiane es la segunda hija de Álex Aguinaga, capitán de la selección ecuatoriana de fútbol, que vive en México hace catorce años por su vinculación al club Necaxa, influencia que a la hora de plantarse en el escenario y demostrar sus cualidades artísticas no le han servido de nada.

“Muchos piensan que Cristiane ha triunfado porque yo juego en un club que pertenece al grupo Televisa. Pero están muy equivocados, ella se ha hecho sola, con puro talento”, dice Aguinaga, quien es su principal fanático.

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A los 6 años, Cristiane se inscribió en el Centro de Educación Artística (CEA) infantil de Televisa, al cual se presentan anualmente cinco mil niños de los 31 estados. Después de realizar una prueba de actuación, baile y desarrollo personal, se escogen 100 niños que entran a un curso de preparación de tres meses y de ellos solo quedan 20 que completarán dos años de estudio en horario vespertino.

Los cursos del CEA son gratuitos y una vez finalizados no se garantiza que los niños puedan conseguir un papel. “Todo depende del talento y de los personajes que necesiten las productoras. Hay muchos que nunca llegan a la pantalla”, dice María del Carmen Vásquez, asistente del CEA.

A los tres meses de estudio, Cristiane obtuvo su primer personaje en Carita de ángel (2000), donde trabajó con la consagrada actriz Libertad Lamarque, quien filmó la telenovela hasta antes de su muerte, a los 96 años. En el 2002 la productora Mapat escogió a Cristiane para que realice el papel de una niña malvada en María Belén y la misma empresa la seleccionó para que este año sea Ximena (una niña bondadosa que lucha por las causas justas) en ‘De pocas pulgas’.

“Escogimos a Cristiane porque es muy buena actriz”, dice Patricia de Zataraín, productura ejectutiva de Mapat. “Yo creo que ella va a dar que hablar durante muchos años. Llegará a ser una estrella, porque además de talentosa, es bonita y canta muy bien”, dice Zataraín.

 En ‘De pocas pulgas’, Cristiane comparte la pantalla con grandes actores como Ignacio López Tarso, don Julián (un anciano viudo malhumorado) y con diez niños más con quienes en la vida real ha entablado una gran amistad.

Si Cristiane sigue por el camino andado hasta ahora, el apellido Aguinaga seguirá conquistando los corazones mexicanos, esta vez ya no desde las canchas, donde su padre consiguió ser el mejor jugador extranjero de la historia, sino desde la pantalla chica.

ESCENAS
FELIZ

“Estoy emocionada porque tengo muchos amigos. Para mí ser actriz no es difícil, solo hay que echarle muchas ganas”, dice Cristiane, quien tiene una profesora particular que la nivela en la escuela cuando debe faltar a clases porque está grabando.

NORMAL
“Ella lleva una vida normal. Cuando trabaja lo hace cinco u ocho horas diarias, pero además recibe clases especiales de actuación en la tarde”, cuenta su madre, María Sol de Aguinaga. “Cristiane todavía no usa maquillaje y de su imagen se encargan los especialistas de Televisa”, explica.