Según La Odisea de Homero, Telémaco era un niño cuando su padre Odiseo –también conocido como Ulises en la tradición romana– abandonó su hogar en la isla de Ítaca para ir a la guerra de Troya. Junto a su madre, Penélope, Telémaco llega a la adultez esperando a su padre. Una vez que los dioses resolvieron que Ulises debía regresar a su hogar, Atenea le advirtió que debía alejar de su casa a los molestosos pretendientes de su madre. Telémaco llenará ese vacío que ha dejado su padre, un padre del que espera su regreso para –a pesar de no haberlo conocido– que yazca con su madre y restaure la vigencia de la ley en la polis.