Para el Museo Metropolitano de Arte, un punto de inflexión se produjo en 2011. Se quitaron los letreros en los que se imploraba a los visitantes que guardaran los teléfonos celulares. El Met modernizó su sitio web, adaptándolo para que se vea en las pantallas de los teléfonos inteligentes. El museo no solo estaba permitiendo al visitante utilizar esos aparatos mientras exploraban las obras de arte, sino que lo fomentaba.