En dos años, José Ignacio N. ha sido sentenciado por dos casos de abuso sexual.
El pasado 29 de septiembre, el Tribunal Penal del Azuay lo condenó a cinco años de privación de la libertad por haber abusado sexualmente de una adolescente de 14 años.
Publicidad
Los jueces además ordenaron el pago de $ 2.000 como reparación integral.
En octubre de 2022 fue la primera sentencia condenatoria por abusar sexualmente de la hermana de la víctima, que tiene discapacidad intelectual del 40 %.
Publicidad
En la audiencia de juicio de la segunda sentencia se presentó el testimonio de la víctima, que relató que el individuo abusó varias veces de ella, entre diciembre del 2021 y enero del 2022.
Los hechos ocurrieron en un inmueble ubicado en la parroquia San Bartolomé del cantón Sígsig.
La víctima viajaba los fines de semana desde su comunidad hasta la casa de su tía, esposa del sentenciado, debido a que desde allí se le facilitaba abordar un vehículo y trasladarse a Cuenca, donde laboraba.
Niña de 11 años con 28 semanas de gestación llegó a hospital de Quito en proceso de aborto
José Ignacio N. aprovechaba la noche para entrar al dormitorio donde la hospedaban y perpetrar el delito. En una ocasión, un primo de la víctima presenció el abuso y avisó lo ocurrido a familiares, quienes denunciaron al agresor.
Entre las pruebas presentadas constaron los testimonios de la mamá y del primo de la víctima, del agente de Policía que realizó el reconocimiento del lugar de los hechos y de los peritos encargados de la valoración psicológica y la del entorno social.
El delito de abuso sexual está sancionado con pena privativa de libertad de tres a cinco años. (I)