Un total de 6.049 presos ocupan actualmente los diez pabellones habilitados en la Penitenciaría del Litoral, la cárcel más poblada del país, de la que cientos de militares tomaron el control el 8 de enero pasado.

Esto, luego de que se confirmara la fuga de alias Fito, cabecilla de Los Choneros, y de que el presidente Daniel Noboa declarara conflicto armado interno para movilizar a las Fuerzas Armadas y que combatan a bandas delictivas, 22 de las cuales son catalogadas como grupos terroristas.

En 2021, el año en el que se registraron varias masacres en este recinto carcelario, había cerca de 8.000 reos en la Penitenciaría. Entonces, el Gobierno de Guillermo Lasso empezó un proceso para reducir el hacinamiento.

Publicidad

Hubo traslados a otras cárceles y hasta indultos para quienes padecían enfermedades catastróficas y habían sido procesados por delitos menores.

Hace un año, cuando el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) publicó los resultados del censo carcelario, se conoció que a finales del 2022 en la Penitenciaría estaban unos 5.300 presos.

En los últimos 16 meses han ingresado unos 2.500 presos más, pero también muchos han cumplido su condena y salieron u obtuvieron la prelibertad.

Publicidad

‘Antes tenías que depositar en la cuenta de los caporales, si no, no comías. Ahora que las Fuerzas Armadas pusieron orden nadie te amedrenta’: así se vive en el pabellón 3 de la Penitenciaría del Litoral

Solo en las últimas cuatro semanas han sido enviados a esta cárcel de Guayaquil unos 600 hombres capturados en Guayas, muchos de ellos procesados por el delito de terrorismo.

Aunque los militares han logrado contener la violencia, el comandante de Operaciones Navales, a cargo de esa prisión, admitió el viernes 9 de de febrero que aún los presos están separados por organización delictiva y no por peligrosidad.

Publicidad

“Están clasificados por organización, y más adelante el SNAI debe hacer un análisis para ver si se puede mezclarlos”, comentó el militar, quien añadió que nunca se han respetado tanto los derechos humanos como ahora, en que las bandas no tienen el control del recinto carcelario.

Actualmente en las celdas de la Penitenciaría del Litoral no hay energía eléctrica. Foto: Carlos Barros/El Universo. Foto: El Universo

El grupo delictivo que más miembros tiene en la Penitenciaría es Los Águilas, con 1.848 integrantes en dos pabellones de esta cárcel.

Le siguen Los Tiguerones, con 1.123 presos que ocupan el último pabellón.

Los Latin King también tienen un alto número de población carcelaria en el centro de detención de Guayaquil, con al menos 1.000 miembros repartidos en tres pabellones.

Publicidad

El pabellón 1 está dominado por los Latin King y tiene 453 reos; el pabellón 3 lo ocupan Los Duendes y son al menos 525 personas privadas de libertad (PPL); en el pabellón 4 están 608 presos que se identificarían como Lobos; mientras que en el 5 los militares también acomodaron a otro grupo de 358 hombres alineados con los Latin King.

‘Los caleteros, mano derecha de los caporales, nos han dado las ubicaciones, pero a veces también dan información falsa’, revela militar durante un recorrido por el pabellón 3 de la Penitenciaría

En el pabellón 6 hay 564 presos que serían parte de Los Fatales; en el pabellón 7 también hay 375 Latin King; en el pabellón 8 están 148 presos que estarían enfermos (no se alinean con bandas); en el pabellón 9 están 1.103 PPL de la agrupación Los Águilas.

En el pabellón 11 también hay unos 750 miembros de Los Águilas; mientras que en el pabellón 12 hay 1.123 Tiguerones. En el pabellón consular hay 41 reos que tampoco se alinean con grupos delictivos.

Los pabellones 2 y 10 están destruidos

Desde noviembre del 2021, cuando se dio una de las más graves masacres en la Penitenciaría, donde hubo 120 muertos, el pabellón 2 está destruido.

El pabellón 2 de la Penitenciaría del Litoral quedó destruido en la masacre del 12 de noviembre del 2021, cuando murieron 120 reos. Foto: Carlos Barros/El Universo. Foto: El Universo

Entonces esa sección de la Penitenciaría estaba dominada por la banda Chone Killer, un brazo armado de Los Choneros, que al igual que otros grupos decidieron separarse después de la muerte de Jorge Luis Zambrano, alias Rasquiña, excabecilla de Los Choneros.

Casi todas las celdas del pabellón 2 quedaron con huecos en las paredes tras la colocación de explosivos por parte de otros grupos, pues el líder de los Chone Killer, alias Trompudo, a inicios de noviembre del 2021 había logrado ser trasladado de cárcel y el pabellón no tenía líder.

Pese a que han pasado 26 meses desde esa masacre, aún no se concretan las adecuaciones para este espacio.

Una historia similar se dio en el pabellón 10 unos meses después.

Pese a estar deshabitados desde hace más de dos años, los militares en las últimas semanas han buscado caletas en las paredes de estas secciones con máquinas que detectan metales. Esas caletas encontradas tendrían años ahí. (I)