El ambiente se volvió tenso en medio de la firma del “acuerdo por la paz” por parte de los representantes de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin) y la Federación Ecuatoriana de Indígenas Evangélicos, y ministros del Gobierno, cuando representantes de la Fenocin empezaron a gritarle a Leonidas Iza “vendido” el momento que suscribía el acta y Gary Espinoza, de esa organización, dudó en firmar el documento. Iza, visiblemente contrariado, dijo que si la Fenocin no quería firmar que “deje vacío”.