Una acción privada a través de una querella por calumnia, una acción contravencional por injurias o una acción civil por daño moral son las opciones que mantienen la fiscal general, Diana Salazar, y su defensa para responder a lo que ella califica como “infamias que ha tenido que tolerar” de parte de quienes la han acusado de que existe plagio en la tesis de grado con la que obtuvo su diploma como abogada en 2005.