En medio del conflicto político generado por el paro nacional, el gobierno de Guillermo Lasso entabla diálogos con grupos sociales indígenas que no están movilizados; mientras que la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), el Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (Feine) y la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin) dan un plazo de 48 horas para que se ejecute el pliego de diez demandas, antes de que se resuelva arribar a Quito para radicalizar las medidas de hecho.