La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Diana Atamaint, respondió con ironía a los cuestionamientos del mandatario venezolano, Nicolás Maduro, quien insinuó un supuesto fraude en la segunda vuelta electoral del pasado domingo, 13 de abril.

“Si el señor Maduro dice que hubo fraude, eso quiere decir que en Ecuador estamos haciendo bien las cosas. Lo grave hubiese sido que nos felicitara”, expresó Atamaint este lunes, 15 de abril, en una entrevista con Teleamazonas.

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La funcionaria defendió con firmeza la transparencia del proceso electoral, frente a los cuestionamientos del movimiento Revolución Ciudadana (RC) y su excandidata Luisa González, quienes no han reconocido los resultados pese a una diferencia superior al 10 %. “No podemos hacer oídos a eso, porque estamos demostrando con documentos, con un proceso ágil, que hemos batido récords y superado nuestras propias expectativas”, afirmó.

Atamaint recordó que tanto el movimiento Acción Democrática Nacional (ADN) como RC tuvieron plena participación en el control electoral. “Tuvimos 95.000 acreditados, con 50 % de cada organización, mirando el conteo voto a voto en todas las mesas y obteniendo el acta pública para su control electoral”, dijo. Añadió que hasta el momento no se ha presentado una sola solicitud formal para revisar actas.

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También advirtió que hablar de fraude implica un delito. “Eso no cae en el campo electoral, sino en la justicia ordinaria. Lo correcto es que, si tienen pruebas, las presenten ante la autoridad competente. Si no lo hacen, es totalmente falso, es mentira. Lo que buscan es conmocionar a la gente innecesariamente”, aseguró.

Respecto al avance del escrutinio, Atamaint informó que 18 provincias ya han cerrado al 100 % y que se espera concluir el proceso este viernes, 18 de abril. Entre los rezagos están Morona Santiago, Pastaza y las actas del exterior, donde aún se deben verificar algunas inconsistencias.

También explicó que la apertura de urnas solo puede hacerse bajo tres causales legales: cuando hay inconsistencias numéricas mayores al 1 %, falta de firmas en el acta o discrepancias entre el acta de la organización política y la del CNE. “Siempre hay errores humanos, pero han sido mínimos y se han corregido con la presencia de delegados de las organizaciones políticas”, indicó.

Finalmente, Atamaint habló de un comportamiento distinto en los votantes respecto a la primera vuelta. El voto blanco prácticamente desapareció, el voto nulo se redujo y se registró un incremento en la participación de personas mayores de 65 años, cuyo voto es facultativo. (I)