El primer día de cada mes, durante ocho años, las familias de los cuatro estudiantes mexicanos que murieron en el bombardeo de Angostura, en Sucumbíos, el 1 de marzo de 2008, hicieron plantones en la Embajada y en el Consulado de Colombia en México para exigir justicia y reparación. Luego decidieron hacerlos solo una vez al año en la fecha de aniversario. Pero eso no quiere decir que se hayan rendido.