La controvertida vacuna rusa Sputnik V ya ha sido aprobada en 60 países de todo el mundo, mientras la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) aún la está revisando. En Brasil, sin embargo, la vacunación con el preparado ruso se detuvo. La agencia gubernamental de medicamentos Anvisa halló en su investigación que el virus portador “Adenovirus 5”, utilizado en la segunda inoculación, no está inactivo y, por lo tanto, puede multiplicarse.