Fidel Chamba, concejal del Distrito Metropolitano de Quito, denunció que luego de un proceso de fiscalización realizado a la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) encontró un presunto hackeo en el sistema interoperado con la Agencia Nacional de Tránsito (ANT).
Según el edil, la AMT firmó un contrato con la ANT para permitir el acceso al Sistema Nacional de Datos, a fin de agilizar trámites como traspasos de dominio y cambios de propietario. Sin embargo, el concejal reportó que entre el 2 de agosto y el 15 de octubre se habrían realizado alrededor de 9.260 trámites de forma irregular debido a la vulneración de 39 cuentas de funcionarios.
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El concejal explicó que los trámites irregulares incluyen cambios de propietario, modificaciones en datos vehiculares, duplicados de matrículas, entre otros.
Los funcionarios afectados habrían realizado cientos de trámites, lo que levantó sospechas sobre un posible hackeo.
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“Es importante que la AMT aclare por qué su sistema, Axis 4.0, no garantiza la seguridad de los datos de los usuarios”, afirmó Chamba.
Aunque la entidad tomó medidas como el cambio de contraseñas y el bloqueo temporal de cuentas, el flujo de trámites irregulares continuó, lo que dio cuenta de que las acciones no fueron suficientes para detener la actividad no autorizada, según un informe entregado a Chamba.
El concejal subrayó que tanto la AMT como la ANT tienen la responsabilidad de proteger los datos vehiculares de los ciudadanos.
El edil solicitó una auditoría integral para esclarecer cómo y cuándo se produjeron los accesos irregulares y qué medidas adicionales se pueden implementar para evitar futuros incidentes.
Además, pidió que se especifique cuántos de los trámites irregulares corresponden a cambios de propietario y otros procesos críticos.
César García, director ejecutivo (s) de la ANT, respondió a las acusaciones indicando que no se puede determinar que se trató de un hackeo, ya que, para calificarlo como tal, debería existir una investigación que así lo establezca.
Según García, muchas de las transacciones cuestionadas no necesariamente son ilegítimas, sino que podrían estar relacionadas con el mal uso de credenciales por parte de algunos funcionarios.
“No es hackeo; si se presta o comparte una clave, eso no implica una vulneración del sistema, sino un mal uso de las credenciales”, puntualizó García.
La ANT explicó que el convenio de interoperabilidad firmado con la AMT establece que esta última debe contar con infraestructura tecnológica propia para gestionar sus credenciales de acceso.
Sin embargo, según García, la AMT no ha implementado todos los requisitos necesarios, lo que ha obligado a la ANT a permitirle el uso de sus claves para continuar operando.
El director subrogante enfatizó que la responsabilidad de la ANT se limita a proporcionar acceso al sistema mientras la AMT cumple con los términos del convenio, sin embargo, el uso indebido de claves sigue siendo un problema de la AMT y sus funcionarios.
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Ante la gravedad de los hechos denunciados, Chamba solicitó a la AMT que informe oficialmente sobre las acciones tomadas y cómo se garantizará la seguridad de los trámites en el futuro.
El concejal expresó su preocupación por la posibilidad de que, al acudir a realizar un trámite en febrero del próximo año, los usuarios se encuentren con registros irregulares en sus datos vehiculares.
Este Diario solicitó una versión oficial a la AMT sobre el incidente, sin embargo, hasta la publicación de esta nota la entidad no ha emitido una respuesta formal, solo se indicó que el tema fue remitido al área de Matriculación para su revisión. (I)