“Si hay alguna problemática como la presencia de metales pesados (arsénico) en el arroz, nosotros vamos a buscar la solución para que eso obviamente no cause inconvenientes para el consumidor local y tampoco para las exportaciones que generan divisas para la economía del país”, afirmó Juan Pablo Zúñiga, presidente de la Corporación de Industriales Arroceros del Ecuador.