Los transportistas agremiados en la Federación Nacional de Transporte Público de Pasajeros Intra e Interprovincial (Fenacotip) continuaron este martes, con su segundo día de paralización. Ellos sostienen que su operación está en riesgo de colapsar por el incremento de los costos del combustible. Estaba previsto que la medida durara 48 horas.
En las terminales de Quito, Guayaquil, Manta y más ciudades del país se pudo comprobar que las boleterías continuaron cerradas. Desde la Fenacotip se informó que si bien el lunes hubo un 95% de cooperativas que plegaron a la medida, este martes ya fueron el 99%. E incluso indicaron que más gremios (volqueteros y transporte urbano) se están sumando y apoyando la protesta de los interprovinciales. En Azuay, medios de comunicación reportaron que el transporte urbano de Cuenca mantendrá plantones toda la semana y el servicio será reducido; y en la parroquia Tarqui se dio la paralización de las vías.
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Es que desde que se implementó el sistema de bandas en el precio de los hidrocarburos, el diésel ha ido subiendo de manera paulatina y sostenida durante diez meses, pasando de $ 1,00 a $ 1,44 por galón. Pero, a pesar de diversas conversaciones entre el Gobierno y transportistas, no ha habido una respuesta clara sobre si habrá compensaciones o una focalización en beneficio del sector.
Así, Abel Gómez, presidente de la Fenacotip, aseguró ayer que la medida tomada se da para pedir al Gobierno respuestas sobre cómo se les compensará por la eliminación del subsidio.
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Recordó que en el Decreto 894 de octubre del 2019 se había planteado que se encuentre un sistema de focalización. Sin embargo, solo se creó el sistema de bandas, que incrementa el precio paulatinamente, pero no se ha procedido a la compensación al sector que lo necesita.
El otro problema que tienen, dijo Gómez, es el financiero: “Quisiéramos que el Gobierno a través de la Junta o de la Superintendencia de Bancos nos ayuden, pues no podemos cumplir con las cuotas”.
Hasta hace pocos minutos, la Fenacotip reportó que no han tenido respuesta del Gobierno ante sus pedidos. En todo caso, hacia las 12:00 está convocada una rueda de prensa por parte del Ministerio de Gobierno sobre “la paralización de los transportistas”. A esa misma hora, Fenacotip tendría una reunión con autoridades del Gobierno.
Entre tanto, Luis Felipe Vizcaíno, presidente de la Fenatrapre (Federación Nacional de Transporte Pesado), apoyó la posición de la Fenacotip. Dijo que tienen razón en su reclamo, pues este tipo de incrementos afectan la economía de los transportistas. Entre tanto, desde su gremio, dijo que están en conversaciones para hacer un planteamiento nacional para solicitar nuevamente al Gobierno que congele los precios de los combustibles.
En el caso de los miembros del transporte pesado, han dicho que para ellos ha sido imposible subir el precio de los fletes, ya que el sector productivo, que es a quienes ellos sirven, no ha estado dispuesto a ajustar las tarifas. Dijo que si bien están de acuerdo con la focalización, para su sector lo que debería hacer el Gobierno es congelar los precios de los combustibles, porque la política de bandas afecta tanto a transportistas como a la sociedad en general.
Mientras, Henry Llanes, experto en temas petroleros, dijo que la paralización de los transportistas interprovinciales es la consecuencia de la aplicación de los decretos ejecutivos 1054, 1158 y 1183 que puso en vigencia el Gobierno nacional a mediados del año 2020.
Para Llanes, en condiciones de enorme crisis socioeconómica, el Gobierno nacional puso en vigencia dichos decretos. Consideró que se debe impulsar una política de focalización de subsidios a fin de proteger la economía de la gente de escasos recursos económicos.
Indicó que también se debe eliminar la intermediación de las comercializadoras a fin de mejorar los ingresos estatales. Para Llanes, el nuevo gobierno de Guillermo Lasso debe poner en vigencia una nueva Ley de Hidrocarburos. (I)