La empresa Trafigura, cuestionada en las cortes de EE. UU. al haber sido nombrada como parte de las empresas que pagaron sobornos a empresarios de Petroecuador para obtener contratos, continúa con una gran participación como proveedora y cliente en la empresa estatal ecuatoriana. La normativa de Petroecuador, cambiada en septiembre del 2023, ahora exige que para que una empresa sea retirada del registro de proveedores y clientes de la petrolera estatal debe tener una sentencia ejecutoriada por tema de corrupción y sobornos. Esto le permite continuar en los procesos pese a tener acusaciones.