Sorpresa le causó a Fernando Quishpe observar a un guardia de seguridad privada en una farmacia cerca de su casa, en el sector de Mapasingue este, en el norte de Guayaquil. “La farmacia tiene más de tres años funcionando aquí y nunca había tenido guardia de seguridad, pero desde la semana pasada ya tienen a uno en la entrada”, dijo asombrado el cliente, aunque reconoció sentirse más seguro con el resguardo.