El anuncio de General Motors sobre el cese de las operaciones de la ensambladora GM OBB en Ecuador preocupa a la industria automotriz, que busca amortiguar el impacto que causará la salida a finales de agosto próximo de la marca que posee el 51 % de participación de los vehículos ensamblados en el mercado local, según las cifras a marzo del 2024 de la Cámara de la Industria Automotriz Ecuatoriana (Cinae). Y uno de los principales impactos lo llevará el sector de autopartes de vehículos, que pierde su mejor cliente.