Después de que en marzo pasado se publicó el reglamento para fomentar la producción, comercialización, industrialización, consumo y fijación del precio de la leche y sus derivados, que permitió aplicar una ley que ya tenía dos años en vigencia, desde mayo del 2022, y de que en septiembre pasado concluyeron las negociaciones técnicas del protocolo sanitario para los productos lácteos exportados de Ecuador a China, el sector lácteo ecuatoriano ya mira con expectativa la apertura para sus productos del gigante asiático, pero también los desafíos en producción e inversiones que debe afrontar.