Ante las pérdidas que cuantifica el sector empresarial en Ecuador y la poca previsibilidad de los cortes de energía que ya entraron en la segunda semana, desde que se inició la programación el lunes 23 de septiembre, el sector privado propone la reorganización de la jornada laboral para que las 40 horas semanales de trabajo se cumplan en cuatro días, es decir, en diez horas diarias.