El precio del arroz no da tregua a los consumidores. Norma Pérez acudió este lunes 26 de junio a realizar sus compras para la semana en un mercado del centro de Guayaquil y su malestar es que este producto “ya no resulta accesible para el consumo, antes solía pagar entre $ 8,50 y $ 9 por un saco de 25 libras, ahora debo pagar $ 12,50″. Y ni quiere pensar ¿cuál será el panorama cuando se presente el fenómeno de El Niño?

Este producto de la canasta básica ha experimentado en las últimas semanas un alza significativa debido al impacto del invierno en el campo, al punto que el Gobierno anunció la importación de la gramínea para cubrir la demanda y estabilizar los precios, aunque productores se oponen y presentaron una acción de protección alegando que sí hay arroz, sembrado y por cosechar, y que el problema es de especulación en piladoras.

Menos oferta de arroz y variación de precios se empiezan a notar en las perchas de los supermercados

Consumidores constatando precios del saquillo de 25 libras de arroz Foto: JESUS ALAVA

En tiendas el precio de la libra de arroz oscila entre $ 0,60 y $ 0,70, mientras que antes estaba entres $ 0,35 y $ 0,40.

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En cadenas de supermercados también se refleja el aumento. Julio suele comprar ahí fundas de 2 kilos y el mes pasado pagó $ 2,30 y luego consumió un saco de 25 de libras que le dieron en su empresa, que ya se acabó y este domingo que volvió a comprar los 2 kilos se topó con un nuevo precio: $ 3,89 por la misma marca que suele comprar, así que escogió otra marca que cuesta $ 3,62 “igual de cara, pero al menos son 27 centavos menos“, comentó.

La semana pasada las perchas de supermercados mostraron que los 5 kg de arroz se vendían entre $ 6,77 y $ 8,92, dependiendo de la marca y el tipo de grano. Ahora estos productos se comercializan a un precio que oscila entre $ 9,47 y $ 9,60.

Agricultores presentaron una acción de protección para que ‘no se importe más arroz’

La alza de precios ha llevado a algunos consumidores a tomar medidas para adaptarse a la situación.

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Mafer Flores, una clienta habitual de una cadena de supermercados, comentó que, ante el aumento en el precio del arroz, está reconsiderando sus opciones de compra. Además mencionó que podría optar por “adquirir en menor cantidad otros productos de consumo para poder destinar un presupuesto adecuado al arroz”, el cual considera como un alimento esencial en su hogar. (I)


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