Un espray, similar a un desinfectante de manos pero para la nariz, bloquearía el 99,9 % del COVID-19. Este novedoso producto, que es desarrollado por la empresa canadiense de tecnología de la salud SaNOtize, dirigida por la israelí Gilly Regev, ya se está probando en ensayos clínicos en Canadá y el Reino Unido desde hace algunos meses.