Al igual que a finales de 2016 cuando el Departamento de Justicia de Estados Unidos hizo conocer que Ecuador era parte de una trama de corrupción liderada por la empresa Odebrecht para la obtención de contratos públicos a través de la entrega de coimas, hoy esa misma instancia estadounidense hace saber nuevamente que en nuestro país, entre 2015 y julio de 2020, se recibieron sobornos para beneficiarse de contratos de compra y venta de productos petroleros.