El 90 % de las empresas públicas del país no tiene estados financieros auditados y en la gran mayoría no son autosustentables. El Gobierno ha tenido que entregar a trece empresas, desde el 2018, unos $ 625 millones para su funcionamiento, mientras que las pérdidas de los últimos cuatro años de las empresas públicas del Ejecutivo ascienden a $ 322 millones.