Noelia Cárdenas vive en Sauces 4, al norte de Guayaquil y desde que empezó la emergencia ha preferido guardar estrictamente el confinamiento para no correr el riesgo de salir de casa y contraer el COVID-19, o afectar a algunos de sus familiares.

Buscó formas para abastecer de alimentos a su familia y la halló en redes sociales. Encontró servicios de delivery, intercambios de alimentos (trueque) y hasta cómo crear un huerto en casa.

Optó por el servicio de entrega a domicilio que realizan algunas tiendas comerciales. "Los productos que compro llegan en buen estado y lo hacíamos para evitar ir a los mercados por prevención", cuenta la joven.

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Ella gastaba $50 y compraba por libra cada producto. Por ejemplo, la libra de papa chola en $0,60; zanahoria en $0,75; cebolla colorada en $1,50, uva roja en $4; frutillas a $3, entre otros.

Sin embargo, ahora que cambió de semáforo de rojo a amarillo en Guayaquil, piensa salir a comprar verduras, legumbres y frutas para ahorrar. "Yo antes (de la pandemia) gastaba $30 cuando iba al mercado, pero ahora que hay más tiempo saldré a comprar", dice y cuenta que antes pagaba $1,50 por tres choclos y con el servicio a domicilio es $1 por unidad.

Cristina Herrera, de Quito, seguirá comprando productos sin salir de casa. Considera que aún no es el momento adecuado y quiere evitar riesgos. "Nosotros hacemos compras para tres familias, las mías, mis suegros y mis padres y el utilizar delivery es lo más seguro de no exponernos a largas filas y aglomeraciones".

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Afirma que antes en el supermercado gastaba al mes $200 y ahora cerca de $350. "Se suman los costos de envíos, pero no le damos tanta importancia al tema del dinero porque para nosotros es más seguro tener el control de la desinfección del producto", menciona.

Mientras que Alicia Molina prefiere adquirir de vendedores ambulantes. Cuenta que a diario se ofertan en un balde de una camioneta o en triciclos de carga como papaya, limón, cebolla blanca, plátano. Dice que le resulta más económico comprar por fundas que por unidad. "Cada funda la venden a $1, de tomate de árbol, zanahoria y compro 25 limones por $1".

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Señala que en la tienda la unidad le sale un poco más. Por ejemplo, cada cebolla colorada a $0,25; pimiento a $0,12: y tomate a $0, 15. "Los vendedores ofrecen en una funda de dos a tres pimientos, tomates y cebollas por $1, aunque no son tan grandes", dice.

Hay quienes buscaron la manera de adquirir desde los productores como Fernanda Carrera. Ella se organizó junto a sus vecinos para comprar alimentos a la Federación de Organizaciones Campesinas del Litoral (Fecaol) y a dos fincas pequeñas en Vinces y Quevedo.

Por $8 compra: ocho papaya hawaianas, ocho limones meyer, ocho naranjas, seis yucas, diez papas, quince pimientos, siete verdes y ocho naranjas. "Sí ahorramos en relación a los precios que encontramos en los supermercados, y nos evitamos el realizar la fila, que entre semana sigue siendo larga", expresa.

En Guayaquil, existen diversos negocios que ofrecen el servicio a domicilio para quienes prefieren quedarse en casa como Mimi Market que cubre Guayaquil, Durán, Daule y Samborondón.

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Es administrado por Mildred Figueroa, de 37 años y su esposo Ramiro Abad. Realizan entregas todos los días y adquieren los productos cada tres días y pasan por un proceso de lavado y refrigeración.

Fresh Market entrega los martes y viernes de 10:00 a 18:00 en Guayaquil. Vanessa Portilla trabaja junto a su hermano en el negocio y viajan a El Triunfo para comprar los alimentos.

Y Karen Cuenca oferta canastas a domicilio. Todos realizan entregan verduras, legumbres, frutas, lácteos y otros alimentos bajo medidas de bioseguridad.

Los huertos y el truque es otro mecanismo para obtener alimentos. Amparo Calderón desde hace dos años tiene un huerto en el patio de su hogar y ha cosechado tomate, pimiento, yerbita, sábila, papaya y plátano.

La misma práctica la tiene Grace Escobar. En estos últimos meses se ha dedicado más a esta labor que le ha dado frutos como: papaya, hierba luisa, cebolla blanca, limón. Espera sembrar cebolla y ajo.

"Yo me ahorro bastante teniendo mi huerto en casa y el sabor de los productos es diferente", indica.

El trueque ha sido muy utilizado durante el confinamiento en los últimos días. Gabriela Camacho es una de las administradoras de la página de Facebook "Trueque Guayaquil", que tiene más de 10 000 participantes.

Se intercambian: perfumes, ropa, juguetes, plantas medicionales maquillaje, reposteros y hasta alimentos de primera necesidad. "Nos ha llamado la atención que entre los productos más intercambiados estén los alimentos, no solo preparado sino como frutas, verduras y enlatados (...) y además en el sentido de valorar que las personas sí están dispuestas a soltar objetos que muchas veces pueden tener guardados en una bodega o que lo valoran", indica.

En el sitio no solo se hacen intercambios de objetos por alimentos sino de servicios. Por ejemplo, una persona ofreció sus conocimientos en diseño de interiores por almendras y leche de almendras. En otro caso a cambio de la instalación de un aire acondicionado se ofrecía una canasta de alimentos.

¿Cómo hacer un huerto en casa?

Nueve consejos comparte Judith Romero, microbióloga y directora del proyecto 'Mi primer huerto', que promueve hace cinco años la siembra de huertos urbanos en centros educativos, instituciones y comunidades. Romero menciona que se puede iniciar con poco espacio y todo es cuestión de disposición. Los resultados se ven en dos o tres meses, incluso menos. Ella aconseja lo siguiente:

1. Planificar en qué se va a cultivar y cuánta cantidad de frutas o vegetales. Aconseja empezar con plantas pequeñas como hierbas o especias como albahaca, cilantro, menta y pérejil hasta poder llegar a a sembrar lechugas, tomates, espinacas y leguminosas.

2. Averiguar cuáles frutas o vegetales son ideales, de acuerdo al clima de la región que perteneces sea Costa, Sierra, Amazonía e Insular. Además, analizar el espacio que posees. Los huertos pueden ser verticales.

3. Utilizar macetas de cualquier material, o reciclar recipientes tales como como botellones de agua, de gaseosas, tarros u otro donde pueda hacerse hoyos para el drenaje de agua. Un recipiente con 15 a 20 centímetros de profundidad sirve para plantar casi todo.

4. Busca un lugar con exposición solar. Seis horas de luz solar es ideal.

5. Escoger la tierra. Para saber si es buena se realiza el siguiente experimento: colocamos en un poco de tierra agua oxigenada, si hace efervescencia la tierra es apta para sembrar, si no hace burbujas vamos a necesitar enriquecer esta tierra con sustratos como compost o humus, de esta manera compensamos los nutrientes que nuestra planta necesitará.

6. Las semillas se pueden extraer de alimentos que consumes en el hogar como de pimientos, frutillas, entre otros. Se deben sembrar a una profundidad que debe ser de 2 a 3 veces de su diámetro.

7. Los bulbos de cebolla, ajo o tubérculos como papa, zanahorias. también se pueden sembrar, pero antes deben estar sumergidos en agua unos días hasta que brote la raíces.

8. Investigar cuánta agua necesita cada planta y en qué horario.

9. Examinar los alrededores de la planta. Hay que detectar los pulgones, insectos de la familia de los hemípteros, que son una mala señal, pero si hallamos a mariquitas, es porque ellas se están encargando de controlar a estos pulgones, ya que son excelentes insecticidas naturales. Para su control podemos investigar sobre extractos orgánicos que nos pueden ayudar a ahuyentarlos. (I)