En Nicaragua están en juego la vida, la seguridad personal, la libre expresión, opinión y reunión. Nadie puede quedar indiferente ante esta situación; de esta manera inicia el comunicado de los miembros de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) que alertan sobre una agresión sistemática, continua y creciente del gobierno del presidente Daniel Ortega contra todos los nicaraguenses.