Una mujer que estaba embarazada de tres meses fue asesinada por su pareja tras recibir varias puñaladas en el cuerpo en presencia de sus tres hijos menores de edad.
La Policía aún busca al presunto responsable y la Fiscalía lo acusará de femicidio, hecho que habría ocurrido la noche del miércoles dentro de su domicilio, en la parroquia San Vicente.
La víctima ha sido identificada como Irene Peralta, de 32 años.
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Como evidencias de la muerte quedaron manchas de sangre en el piso frente a la puerta de madera por la que salió gravemente herida.
Esta sería la segunda víctima de femicidio en menos de una semana, pues el 31 de diciembre pasado, en Babahoyo, una mujer de 29 años fue asesinada presuntamente por su pareja.
Santiago Villa, tío de la fallecida de Cuenca, presentía este fatal desenlace porque el supuesto victimario “era agresivo”.
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Recordó que en varias ocasiones lo denunció ante las autoridades, le sacó una boleta de auxilio y hasta se separaron. Sin embargo, al poco tiempo el hombre la buscó y tras convencerla de que las cosas cambiarían retornaron a El Pan, donde ella trabajaba en el departamento de Promoción Social del Municipio.
Allí estaba a cargo de proyectos con grupos vulnerables como adultos mayores y niños de escasos recursos.
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Según el relato de la hija de 12 años, antes del ataque, Hernán D., el presunto responsable, brindó a la fallecida un café que contenía una sustancia desconocida.
Al negarse, él entró en cólera y empezó a atacarla con un cuchillo sin importarle que ahí estaban sus hijos.
Según el fiscal Adrián Rojas, hay todos los elementos para decir que es un femicidio porque el hombre la mató por su condición de género y ejercía poder sobre ella.
En el año 2017 la provincia cerró con trece femicidios, doce recibieron sentencia y uno está en la etapa de investigación. (I)
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Irene era una mujer tranquila que en una ocasión me conversó que tenía problemas en la casa, pero tenía la esperanza de que su pareja se componga.Rigoberto Chocho, compañero de trabajo de la víctima
