En 1990 Lázaro Báez trabajaba como contador en el Banco de Santa Cruz y solo tenía una casa. En ese tiempo comenzó su amistad con el ahora fallecido Néstor Kirchner, quien un año después asumió el cargo como gobernador de esa provincia argentina, mientras que Báez llegó a la gerencia de la entidad financiera y luego creó la empresa Austral Construcciones S.A. Así fue el inicio de una máquina de hacer fortuna en los doce años que duró el gobierno de los Kirchner.