Luego de seis años al frente de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión (de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH), la colombiana Catalina Botero deja su cargo hoy. El relevo le corresponde al abogado y periodista uruguayo Édison Lanza. En entrevista con este Diario, vía correo electrónico, evalúa brevemente su gestión, que incomodó a ciertos gobiernos –como el de Rafael Correa– por sus observaciones sobre el abuso de poder y la restricción de las libertades.