Kamensk-Shajtinsky, Rusia
La OTAN y Ucrania informaron ayer que vehículos militares rusos entraron al territorio ucraniano durante la noche del jueves pasado, y el presidente ucraniano Petro Poroshenko informó que la mayoría de ellos fueron destruidos por sus tropas.
Un comunicado publicado en la página de internet de la presidencia indicó que él y el primer ministro británico, David Cameron, hablaron por teléfono sobre los reportes de algunos periodistas occidentales de que fueron vistos vehículos militares rusos cruzando la frontera hacia Ucrania, cerca del punto donde estaba estacionado un convoy ruso de ayuda humanitaria.
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“El presidente informó que los datos suministrados eran confiables y fueron confirmados, y que la mayoría de las máquinas fueron eliminadas por la artillería ucraniana durante la noche”, señaló el comunicado, pero no se incluyeron pruebas.
En tanto, el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, dijo que la alianza militar observó una “incursión” rusa hacia Ucrania.
“Lo que vimos anoche fue la continuación de lo que hemos visto algún tiempo”, declaró en una visita a Copenhague.
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Gran Bretaña citó al embajador Alexander Yakovenko para aclarar los reportes de la invasión militar rusa.
Moscú asegura que sus fuerzas patrullan la frontera y negó que vehículos militares hayan entrado al país vecino.
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La jefa del gobierno alemán, Angela Merkel, instó este viernes por teléfono al presidente ruso, Vladimir Putin, a “poner fin al envío de material militar, consejeros militares y personal armado a través de la frontera con Ucrania”.
Ayuda humanitaria
acuerdo
Sistema de entrega
El presidente de Finlandia, Sauli Niisto, confirmó que Rusia, Ucrania y el Comité Internacional de la Cruz Roja han llegado a un acuerdo sobre el envío de ayuda humanitaria a la sitiada ciudad de Lugansk. Rusia permitió a funcionarios ucranianos inspeccionar la caravana humanitaria y acordó que la Cruz Roja distribuya la ayuda a los pobladores sin escolta militar.
