Cuando alguien sufre de estrés, ansiedad o emociones negativas, tanto su salud mental como su bienestar pueden verse afectados, de allí radica la importancia de tratarlo.
En la actualidad, la mayor parte de los adultos pueden llegar a experimentar alguna de estas reacciones producidas por el cuerpo ante una situación tensa; no obstante, todo puede complicarse cuando se llega a los extremos y se ve afectada la calidad de vida. Ante esta situación, el portal GQ recomienda tener estrategias y herramientas que permitan tomar el control de la situación.
¿Qué es la técnica de la silla de pensar?
La silla de pensar, también conocida como el rincón de pensar, es una técnica que ha sido usada por décadas tanto por familias como por educadores en la formación de los niños; sin embargo, ese no es su fin.
Publicidad
En la década de 1960, el psicólogo estadounidense Arthur W. Staats popularizó el concepto de la silla de pensar e introdujo el término de “tiempo fuera positivo” o de reforzamiento. Contrario a lo que se puede pensar, este método fue ideado para ser usado por los propios adultos con menores a su cargo y no como una herramienta para corregir la conducta de los niños.
Para Staats, esta técnica debía ser aplicada por adultos que sintieran que no podían controlar su enfado, su rabia o su ira, entonces debían sentarse en una silla durante unos minutos y pensar en otro modo de actuar en vez de hacerlo mediante el impulso o la violencia. Ese tiempo de reflexión podría servirle para recapacitar, tomar conciencia de la situación y calmar la molestia antes de actuar.
Su inspiración fue que en esa época las cifras de violencia física y verbal eran muy altas, pues era un recurso común aplicado para educar a los menores.
Publicidad
Un error aplicarlo en niños
El País de España explica que aplicar este recurso en niños es un error, ya que estos no pueden reaccionar como un adulto, pues su cerebro no ha alcanzado la madurez para hacerlo. Estas son las complicaciones que puede traer en menores de edad:
- Baja autoestima: los recursos empleados como un castigo pueden hacer sentir al pequeño que no es suficiente para su entorno más cercano.
- Vínculo de apego resentido: los comportamientos y patrones que hacen que el pequeño se sienta poco amado y expuesto. Es decir, los límites son necesarios, pero se deben poner con amabilidad y respeto.
- Ver el acto de pensar como algo negativo: cuando se les aplica un correctivo de este tipo, se les invita a tener esta creencia y lejos de esta idea, reflexionar es sinónimo de enriquecimiento.
- Miedo a la soledad: esta herramienta invita a pensar solos, sin acompañamiento de otra persona, por lo que ven la soledad como algo negativo.
(I)
Te recomendamos estas noticias
- Los tres trastornos mentales que padece Grimes, la ex de Elon Musk: “por eso no sé escribir nada sin corrector”
- Luis Antonio Ruiz se va de ‘En Contacto’: “Tengo otra enfermedad, ya no en el ámbito físico, pero sí en el espiritual”
- Filtro Chubby: la última tendencia en redes sociales que genera polémica por considerarse gordofóbica